Estrategias de comprensión lectora. Adaptado de: http://mdlmaster.learnnet.net/
Juan, un alumno de 10 años, coge un libro de animales para leerlo, y su primera conducta es llevar a cabo “un paseo” por los elementos de la estructura del texto (echar un vistazo al título, el contenido de la contraportada, el índice, las fotos o dibujos… etc.), con la idea de obtener una idea previa de su contenido, adelantar hipótesis sobre el mismo, y sin duda fijarse un objetivo de lectura de dicho libro (algo que desea aprender).
Ana, una alumna de 8 años, le comenta a una compañera la similitud que existe entre lo que le ocurre al personaje de la narración que está leyendo, y lo que lo ocurrió a un amigo, estableciendo así una conexión entre hechos y personajes.
Luisa, una estudiante de 10 años acaba de leer un fragmento de un texto sobre los efectos de la contaminación atmosférica, y se hace la siguiente pregunta: “… pero, ¿cuáles son las razones para que no sean obligatorios los coches eléctricos?
Con el mismo texto, Pedro, un compañero de la clase de Luisa, reflexionando sobre el significado de la palabra ”hidroeléctrica”, para él desconocida, decide releer un fragmento, sin poder descubrir su significado. Decide finalmente segmentarla en dos partes (“hidro” y “eléctrica”), para llegar a la conclusión de que su significado estaría relacionado con la electricidad que se produce con el agua.
¿En qué se parece la conducta lectora de estos cuatro estudiantes? En que todos echan mano de estrategias, o “herramientas de la mente”, para ayudarse en el proceso de comprensión del texto que leen.
La idea de herramientas de la mente fue propuesta por Lev Vygotsky (1978), para justificar y proponer que los niños deben construir destrezas intelectuales, para la resolución de los problemas de conocimiento o comprensión del mundo que les rodea. Este investigador ruso plantea que, del mismo modo que los seres humanos nos hemos valido históricamente de herramientas físicas para ampliar nuestras habilidades físicas, el conocimiento del mundo y el de los objetos, para posibilitarnos así el hacer algo que no seríamos capaces sin su ayuda, también somos capaces de inventar otras herramientas para mejorar nuestras habilidades mentales.
Estas herramientas de la mente (estrategias), las hemos construido a lo largo de la historia del hombre para planificar, controlar y evaluar acciones de conocimiento, para pensar mejor, y para ampliar nuestras destrezas cognitivas y metacognitivas.
Herramientas de la mente.
Las estrategias de comprensión lectora, importantes herramientas de la mente
En el ámbito del desarrollo de la comprensión lectora, el que los niños adquieran estos instrumentos intelectuales de orden superior es crucial para la creación de lectores independientes, expertos y críticos con la información escrita que manejan, y que se les ofrece.
Y los docentes somos responsables de ponerlas a su disposición,para desvelarles el proceso reflexivo que conlleva su uso en contextos reales de lectura, ayudarles a aprender a utilizarlas a través del andamiaje oportuno, y finalmente para transferirles la responsabilidad de su uso independiente (Calero, 2012).
Cuando los niños tienen herramientas de la mente, son capaces de un modo autónomo de aprender y dirigir su atención hacia la comprensión del texto. A la vez, esa autonomía del lector en el uso de estas herramientas, libera al docente de la responsabilidad de intervención en todos y cada uno de los aspectos del proceso cognitivos en la búsqueda del significado.
Sin embargo, cuando los estudiantes carecen de estas herramientas de la mente, no saben qué hacer para comprender un texto. Así:
- Entienden que leer es no confundirse en el reconocimiento de palabras. No llegan a tomar conciencia de que leer es comprender.
- Desconocen la diferente estructura externa e interna de los textos narrativos y expositivos.
- No se sirven de los elementos estructurales de los textos (título, contraportada, índice, gráficos, mapas, etc.), para establecer una primera idea de su contenido, y así concentrar su atención hacia lo que va a leer.
- Comienzan leyendo, sin parase a prever su contenido. No suelen fijarse un propósito de lectura.
- No están acostumbrados a establecer inferencias texto-texto, texto-lector, texto-mundo.
- No acostumbran a autocuestionarse sobre lo que leen, porque las cuestiones sólo las hace el profesor, o el final del propio texto.
- Carecen de estrategias de reparación de la comprensión perdida: relectura, seguir leyendo, reflexionar sobre las palabras-clave de los textos de carácter expositivo (en primer lugar, a causa de, comparado con, etc.).
- Y, esencialmente, no controlan y regulan el proceso metacognitivo de la comprensión.
- Calero, A. (2012) Cómo mejorar la comprensión lectora. Estrategias para lograr lectores competentes. Wolters Kluwer. Madrid.
-Vygotsky, L. (1978) Pensamiento y lenguaje. Madrid. Paidós
Andrés Calero
@acalero1